domingo, 11 de mayo de 2014

Una contradicción, por favor

Hablamos de la libertad que nos inventamos.
La verdadera libertad nos es arrebatada en el momento en que somos arrojados a este frío suelo sin apenas pedirnos permiso. A nuestros pequeños cuerpos de ácido les falta metal que corroer, somos dulcemente inexpertos incluso cuando decidimos dejar de sufrir entregándonos al universo. Y obviamente sí, hablo de morir, de morirnos. De desaparecer. Y no, no entiendo muy bien qué hace una niña de dieciséis años a las once de la noche de un domingo abriendo la ventana sólo porque abajo alguien está fumando marihuana y quiere oler un poco de verde, ya que joder, está rodeada de gris asfalto y miradas que ni siquiera tienen color.
Hablamos de la libertad que dibujamos con el negro del suelo de nuestras celdas.
De la libertad que nos inventamos porque no, no podemos vivir admitiendo que no somos libres. Antes morir que gritarle al espejo
NO ERES LIBRE
pero qué más da a estas alturas de la película, qué mas da. Mírales cómo caminan cabizbajos, cómo quieren creer saberlo todo, cómo se consumen.
La vida de quién, los recuerdos de quién, el camino hacia dónde y desde cuándo.

(sólo digo que la autodestrucción también es libre
mente
esclava)

martes, 6 de mayo de 2014

Carita de sur

Por si alguna vez me faltas
he guardado los amaneceres.
Los buenos días y los timbres de segunda hora.

Por si alguna vez me faltas,
he guardado también las pizzas de carne
y la culpa de después
(y de después de los silencios
que esa
abulta más)
he guardado los secretos,
los planes, los "no sé",
en resumen, la adolescencia.

Por si alguna vez me faltas
he guardado también las noches,
las fiestas,
las tardes de la nada,
el centro que nunca se acaba,
salir por la parte de atrás
de Plaza España.

Por si alguna vez me faltas,
he guardado palomitas
(y palomas
para que nunca se nos olvide volar)

Por si alguna vez me faltas
he guardado las matemáticas,
los bancos de todos los parques,
tu terraza
y mi piano.

Por si alguna vez me faltas
he guardado las canciones
porque las historias más bonitas
se cuentan con acordes
y eso tú lo sabes muy bien.

Por si alguna vez me faltas
he guardado todas nuestras lágrimas
en un frasquito
para no vaciarme
(ya sabes,
el vaso)

Por si alguna vez me faltas
he guardado tus apuntes,
y mi agenda
la he vaciado
para que quepas tú
y todo tu corazón.

Por si aluna vez me faltas
he guardado toda la atención
que ponemos en no perdernos
en no peinarnos
(y despeinarnos
bailando)

Y es que
por si alguna vez me faltas
sé que si alguna vez te falto
yo ya me habré faltado a mí.

Por eso
me guardaré
(descuida)
de que no me faltes
nunca.